¿?

la palabra control es tan difícil, llega de repente y se va como llega. cuesta mantenerla, acostumbrarla porque se escapa de nuestras manos, de las mias.
es fuerte darse cuenta cómo dependemos de ciertas cosas, cosas que creermos alejadas y que en un momento indeterminado regresan sin nuestro consentimiento.
es fuerte ver cómo la realidad no quiere mostrarse tal como es, como se escuda en la mentira, en el silencio, en la oscuridad, en un imple reflejo desgraciado que colisiona en nuestros pensamientos perpetuos (perpetual thought).
queremos ordenar el caos, ese desorden descontrolado casi totalmente que nos atormenta día a día y se convierte en la peor pesadilla de nuestras vidas, con una solución que dure para siempre, con un final feliz lleno de alegría, pensando que todo podría cambiar para bien.
será tan así? en estos momentos cualquiera podría decir que sí, que seremos felices; cualquiera que no haya dicho "stop", las demás nos queremos hundir, ahogarnos, pudrirnos, matarnos si es necesario para alcanzar la perfección por completo, mientras que lxs otrxs luchan contra viento y marea para recuperarse, año tras año, década y así, quizás cuánto tiempo más, supongo que todo el que sea necesario. la mente no es fácil de curar, nuestra vista seguirá siendo la misma, viendo lo que nuestra conciencia quiere ver, sin importar lo que nuestro corazón sienta y quiera.
arrasa con todo.