Algo extraño pero muy agradable.

hoy, o por lo menos en este momento le soy indiferente a mi estado anímico. quiero estar un rato tranquila, me dejaré llevar... veré hasta dónde puedo llegar, hasta dónde llegarán mis impulsos y mi ansiedad. quizas mañana me enfadaré por lo que hoy hice, pero tengo que aprovechar de alguna manera el día sin tener perpetuos pensamientos a cada momento. no voy a cambiar por hacer esto, todo está claro en mí, sólo quiero un poco, un día, si es posible, de tranquilidad, por lo menos un día, o lo que queda del día sin pensar en lo que haré, en el pasado y en el presente, si es que hay.
cada segundo después del otro ya es el futuro.
me animé a subir un comentario porque era el momento para hacerlo, puede que en unos minutos más me siente mal, nuevamente, pero habré disfrutado el poco rato de tranquilidad. todo porque me encontraba sentada en la ventana de mi pieza, cómoda, lista para fumarme un cigarro y relajarme, olvidarme de todo por un instante y dejarme llevar por el humo, por las cenizas, relajarme con la nicotina y mirar el cielo. en eso empieza a lloviznar, qué mejor, escuchando buena música, cigarros, un cielo nublado sin mucho frío y sentir como caen las gotas en el rostro y en la mano, poco a poco. hubíera sido mejor estar en un balcón, con una hermosa vista, hubiera sido lo ideal, pero no, esta vez tenía un muro al frente que impide la entrada de un poco de sol, ni un poco de luminosidad, de vez en cuando el sol logra esquivar ese muro y hace que se refleje en la muralla un rayo de su luz en mi cuarto.
en el momento de la llovizna fui tan feliz, hacía mucho tiempo que no me sentía así, quizás ésta es la primera vez que me sentía así, primera y la última, quién sabe. era una sensación extraña. no era una felicidad de esas que pasan cuando se está con amigxs, no, era muy diferente, otro tipo de felicidad, y muy agradable pero a corto plazo. quizás de esos momentos de felicidad que se dan una vez en la vida, o muy pocas veces, que en algún indeterminado momento llega a parecer hasta extraña. y eso es lo que me tiene feliz ahora, en este preciso momento. me gustaría que se quedará para siempre esa sensación conmigo, que fuera parte de mi esencia, que quedara impregnada por siempre en mí, pero no, con el paso del tiempo, de las horas, de los minutos, de los segundos se va agotando. y se va.. ojalá vuelva. quién sabe...
a pesar de todo, hoy es un buen día, en el que no le daré importancia a cosas insignificantes.

escrito a las 16:52 p.m